24 de enero de 2009

De las relaciones entre la papaya y la cerveza

¿Qué cuál es la relación entre una papaya y una cerveza? Nada más simple que eso. Se parecen, para iniciar, en que algunas cervezas son amarillas y las papayas por lo regular tienen un tono de naranja. El cual se puede lograr al combinar algún tono del rojo, con el mismo amarillo de la cerveza que usted pensó. Es cierto, esa relación, no es la más convincente, pero qué tal el hecho de que por lo general, tanto las papayas como las cervezas, tienen un sabor extraño la primera vez que se les prueba, y con el tiempo muchas personas llegan a encontrarle un gusto casi natural a ambas. De hecho, fue ese argumento el que me inspiró a escribir este pequeño ensayo. También se parecen, claro está, en que las papayas se obtienen directamente de la naturaleza, y las cervezas también, tras algunos cuantos procesos por supuesto. A decir verdad, ese último argumento es la relación más trivial, y en ese contexto todo tendría esta misma relación, lo que lo convierte en una falacia, pues en realidad, todo lo que existe proviene de la naturaleza, y aún el producto más sintetizado, viene de alguna forma, de una fuente natural. El punto de esto, es que la razón es capaz de encontrar varias relaciones entre las papayas y las cervezas, porque de esa forma la razón ordena al universo, a través de relaciones. Y si establecemos el hecho de que las relaciones entre una cosa y otra existen, y sabiendo que las posibilidades son siempre infinitas, debe haber un número infinito de relaciones entre las papayas y las cervezas, entre las papayas y las computadoras, entre las ratas y las nubes, y entre muchas cosas, con todas las demás. El hecho de ponerle nombre a esas relaciones, es un artificio de la razón, pero es innegable el hecho de que alguna relación existe, porque la cadena infinita de relaciones entre usted y el universo lo sitúa hoy, en este punto, leyendo esta digresión a todas luces sin sentido.


Habiendo probado, o al menos establecido a través de una sentencia categórica, el hecho de que las relaciones existen, haré un salto cuántico al estilo de Santo Tomás de Aquino, pero espero que esto nos pueda llevar a una reflexión. Entonces como decía, si todo está relacionado a través de la razón, o porque necesariamente lo está, y las relaciones son infinitas, podemos hacer alusión al hecho de que la última relación de todas las cosas, es un conjunto más grande que todas las demás, así como los productos sintetizados vienen de la naturaleza, la naturaleza proviene de algo más, y todas las relaciones, espaciales, sentimentales, emocionales, físicas y de las demás categorías, deben por fuerza estar relacionadas por una relación última. La relación del infinito podría decirse, desde el punto de vista matemático (si es que alguien se atreve a hacer un algoritmo de esta verborrea, como se han atrevido con muchas otras); o la relación que implica que Dios sea el ente relacionante y universal de todas las cosas, siguiendo la secuencia de las premisas expuestas. Llévelo usted a una reflexión, y póngale el nombre que más se ajuste a sus ideas.


Rodolfo Monterroso.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Efectivamente las relaciones que se sucitan entre un sin número de realidades son infinitas, pero quizas guarda un orden lógico de ideas, pero irrelevantes entre todas las demás relaciones existentes en nuestras ideas. El sentido de mi comentario va dirigido a establecer la relación que sugiere el autor. La relación que establece mi intelecto parte del convencimiento de que ambos son "alimentos" y que tienen la relación de ser gustos adquiridos, por una parte la papaya tendrá su motivación por cuestiones de salud y la tosudez de una madre en crear hábitos saludables en un niño, de lo que resultará muchas veces contraproducente para el niño que terminará aborreciendo la papaya (como en mi caso); por otro lado la cerveza tendrá su motivación en la presión social o los usos sociales, ya que no me dejaran mentir que tomarse una cerveza es una manera de expresar el gusto de estar en confianza y entre amigos. La relación más profunda aunque usted no lo crea es que ambas al principio pueden resultar desagradables al gusto y quizas muchos ni se recuerden de esta primera sensación con la papaya y otros me puedan decir que la cerveza es de lo más refrescante. Lo cierto es que esta es la relación que establece mi razón en esta búsqueda de crear un orden de ideas y relaciones infinitas.